miércoles, 21 de mayo de 2008

La promesa del almogávar

Nueva y espectacular portada para la nueva edición de la novela de nuestro compañero Francisco Oliver


http://www.lapromesadelalmogavar.com/

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Una mierda de portada, una mierda de novela.
Jamás compraría una cosa así, Sebastián Roa si que es un buen escritor

Anónimo dijo...

Creo que te estás equivocando
No haces ningún favor a Sebastian Roa dejando estos comentarios
Además no va nada con su estilo y no creo que le gustara leer cosas así. Por lo que sé, él prefiere que gruñan los bichos y que las novelas hablen por sí mismas, con estas palabras
Y te lo digo con conocimiento de causa
ERR

Anónimo dijo...

Déjalo que haga el ridículo él mismo. Poco tiene de historia esa mala novela, no es más que un engaño, a mi como turolense no me representa

Anónimo dijo...

Cuando digo mala novela me refiero a la fantasmada almogavar

Anónimo dijo...

Luis Llorens, de Barcelona (pero criado en Zaragoza).
A mí me ha gustado mucho. Me parece que los almogavares son los verdaderos protagonistas del relato.
Hay momentos buenos de la novela, y otros, tan extraordinarios que se hacen demasiado cortos.
El tema histórico, que es el que de verdad me interesa, está muy conseguido. Bien la ambientación, sobre todo la de Occitania, el aspecto histórico de los personajes, su caracterización y su implicación en la historia.
Y sobre todo, el título, una promesa y un almogavar.
Ciertamente, de un recreacionista, era lo que me esperaba.
A mí me dejó con ganas de seguir leyendo más de este autor.

Anónimo dijo...

Este comentario es falso. Soy Luis Llorens y no me ha gustado nada. Insisto, nada de nada. Qué es esto, Señor Oliver, ¿una verdadera vergüenza?

Anónimo dijo...

Señor Oliver, el comentario anterior es falso. Le ruego que no utilice mi nombre en vano.
De lo contrario colocaré comentario en todos los foros y tiendas de libros que pueda. A fin de cuentas soy corrector ortográfico, con lo que alguna facilidad tengo para que me los publiquen...
Luis Llorens.